Listas Top 10
El origen de la familia de cannabis Kush se encuentra en el macizo montañoso del Hindú Kush, en la frontera de Afganistán y Pakistán. Hace miles de años, posiblemente decenas de miles de años, el hombre ya cultivaba Kush allí.
Durante la década de los 70, los contrabandistas sacaban semillas de esta preciada variedad autóctona de la región. "Cazadores" de marihuana estadounidenses y europeos que seguían la "ruta hippie", se cruzaron con la Kush en sus viajes. Ya te hemos informado un poco sobre el qué, el dónde y el cuándo.
Pero, ¿y el quién? Determinar quiénes fueron los individuos que trajeron los antiguos genes Kush a Occidente sigue provocando acalorados debates e historias fascinantes, pero lo único que sabemos es que sucedió en el momento justo. En 1979, la Unión Soviética invadió Afganistán, iniciando así una época horrible. Desde entonces, la guerra y los conflictos han afectado a todo Oriente Medio, acabando con las expediciones de civiles en busca de semillas de Kush. Por suerte, criadores de Estados Unidos y Europa han estado cultivando, cruzando y refinando los genes Kush originales durante casi 50 años.
¡Y aquí tienes nuestro Top 10!
Una variedad que ocupa el trono de las Kush y que, en nuestra opinión, es la reina de todas las variedades Kush, es la OG Kush. Un supuesto cruce de Chemdawg, Lemon Thai y Pakistani Kush, la OG Kush es marihuana para entendidos.
Sus pegajosos cogollos de color verde fluorescente, con un nivel de THC de más del 20%, que golpean con un efecto doble, animado y sedante, han hecho de la OG Kush una leyenda viva. Aclamada por la crítica y muy apreciada por fumetas de todo el mundo, esta Kush destaca entre las demás. Únete a la revolución y cultiva la OG Kush.
¿No te cansas nunca de la maravillosa Kush? Entonces tienes que probar la Critical Kush. El cruce de la variedad Kush de moda, la OG Kush, con la favorita de los cultivadores comerciales, la Critical, produce unos rendimientos superiores sin afectar a su potencia de hasta un 20% de THC. La Critical Kush es un compacto híbrido de predominancia índica y rápida floración. Ideal tanto para entendidos como para principiantes.
En tan solo 60 días de floración, o menos, esta variedad ofrece un rendimiento excelente sin apenas exigir cuidados. Es muy sensible a los potenciadores de floración y tolera dosis de fertilización elevadas. La Critical Kush produce cosechas interiores de 500g/m². En el exterior y en un lugar soleado, en recipientes grandes y con un poco de intimidad, sus densos arbustos de 1-1,5m de altura pueden producir 500g o más.
Para el cultivador que prefiere las Kush clásicas y siempre busca una genética ganadora, le recomendamos la Master Kush. Esta híbrida de la vieja escuela de Hindu Kush y Skunk #1, es un placer de cultivar y una variedad estupenda para sacar esquejes con gran porcentaje de éxito.
La elección de una planta madre de Master Kush no podría ser más fácil, ya que es muy estable y presenta pocas variaciones, incluso cuando se cultiva a partir de semillas. La mayoría de las Master Kush son pequeñas y robustas, y están listas para su cosecha en 8-9 semanas.
Ten cuidado con el moho en zonas de mucha humedad. Sus colas se hinchan considerablemente en las últimas semanas de floración. Se trata de una Kush discreta, gracias a su sutil aroma. Una Kush que pasa desapercibida en varios aspectos, y con un suave efecto físico en vez de un fuerte colocón sedante.
Tal vez el híbrido Kush más fácil de cultivar y, sin duda, uno de los más productivos. Su herencia genética está compuesta de Afghani #1 y Skunk #1 y proporciona a esta extraordinaria variedad un efecto equilibrado entre índica y sativa. Su lado cerebral es eufórico y golpea primero, pero no demasiado, sino de forma agradable, seguido poco después de un apacible colocón corporal.
El espectacular vigor híbrido es lo que diferencia a esta Kush del resto. Tiene un período de floración de sólo 7 semanas. Sus rendimientos pueden ser impresionantes tanto en interior como al aire libre, especialmente en el sur de Europa. Puede producir hasta 550g/m² con el método SOG. Si se planta en macetas grandes y bajo luz solar directa, puede llegar a producir hasta 1kg por planta. Esta Kush es rauda y veloz.
La Cataract Kush es una favorita entre los cultivadores estadounidenses y uno de los mejores híbridos Kush del mercado. Ha sido creada mediante el cruce de dos leyendas Kush estadounidenses: O.G. Kush y LA Confidential. Afirmar que esta marihuana tiene un aroma penetrante es quedarse cortos. ¡La Cataract Kush apesta! Su olor a combustible y skunk persiste en el ambiente, así que asegúrate de usar filtros de carbono.
Presenta el clásico aspecto Kush, con gigantescas hojas verde oscuro y gruesos tallos. Produce unos rendimientos interiores de hasta 500g/m² y superiores a 80g por planta en exteriores con climas cálidos y secos. Tolera altas dosis de fertilizantes, y es buena idea practicarle podas apicales para obtener el máximo rendimiento.
La Cataract Kush induce un colocón progresivo que, de repente, te deja pegado al sofá, con las piernas débiles y visión de cataratas. Una potentísima Kush de última generación para fumetas experimentados.
¿Qué se obtiene cuando se cruza una O.G Kush con una Grape? Un auténtico miembro de la realeza del cannabis. Dios salve a la King's Kush. Esta variedad es perfecta para el cultivador de interior que prefiere los métodos ScrOG o LST.
Tras un período de floración de 9 semanas, el color de las hojas de la King's Kush se transforma gradualmente de verde a casi negro. Sus cogollos son densos y escarchados y de color verde lima. Produce un impresionante espectáculo estético en el jardín. Un 20% de THC, un sabor agridulce y un subidón alegre y duradero, te convertirán un cultivador leal de la King's Kush.
La Lemon Kush es una delicia de sabor ácido con una edificante pegada sativa. Su linaje es parecido al de la O.G. Kush, pero se diferencia por un fenotipo distinto. Se cree que es una mezcla de Chemdawg, Lemon Thai y Pakistani Kush, cruzadas en la costa oeste de EEUU. En lugar del intenso efecto sofá de la O.G. Kush, induce un inspirador y creativo subidón que es una agradable sorpresa.
Más que un dulce y afrutado sabor a cítricos, la Lemon Kush tiene un gusto agrio a limón amargo. En 8-10 semanas de floración, esta Kush de predominancia sativa se estira sin necesidad de poda y/o entrenamiento. El método ScrOG es ideal para obtener unos rendimientos máximos mientras se controla la copa de la planta. Además, esta Kush pide mucha fertilización y se desarrolla de manera excepcional en sistemas hidropónicos. Sus cogollos son compactos, están cubiertos de resina pegajosa, y muestran los clásicos rasgos índica. Pero, no te equivoques, se trata de un material de primera con un nivel de THC de más del 20%.
La Vanilla Kush es la deliciosa descendiente de las antiguas variedades Kashmiri y Afghani. Este alucinante híbrido Kush ha sido criado de forma selectiva para que cumpla con todos los requisitos más exigentes para una índica de calidad. Pero lo que diferencia a esta Kush del resto es su singular olor y sabor a vainilla.
La Vainilla Kush crece como una oscura planta enana con numerosas ramas, ultra compacta y con muy poca distancia internodal. No suele superar el metro de altura, ni siquiera en exterior y a pleno sol. De entre los mejores híbridos Kush, la Vanilla Kush es uno de los más deliciosos y versátiles. Esta variedad prospera muy bien en diversos sustratos, tanto en interior como en exterior. Disfruta de las últimas caladas del día con este pegajoso postre verde. Tras sólo 8 semanas de floración, incluso cultivadores novatos podrán cosechar sus generosos cogollos Kush, duros como piedras y con un 22% de THC.
Una auténtica Kush silvestre de montaña sin contaminación de cruces modernos, aunque muy apreciada para la cría. La Hindu Kush es la misteriosa marihuana original procedente de las montañas del Hindú Kush. Muchos bancos de semillas se han fundado a partir de estos antiguos genes autóctonos puros.
La Hindu Kush es una planta compacta, resistente y robusta, muy fácil de cultivar y que apenas necesita nutrientes. Crece como un esqueje, incluso a partir de la semilla. Es muy recomendable para el método SOG, tanto en interior como en exterior, y para cultivos clandestinos en balcones. Tiene un período de floración de solamente 7 semanas. Se recomienda usar un sustrato orgánico para obtener el clásico aroma terroso a hachís y sándalo. Esta variedad ofrece un cogollo tranquilizante de la vieja escuela, de efecto relajante pero sin resultar excesivo.
La Afghan Kush es, posiblemente, la Kush que provocó el resurgimiento de esta familia. Sus genes fueron presuntamente sacados de forma ilegal de Afganistán justo antes de la invasión soviética de 1979. Muchos nuevos híbridos y fenotipos de élite se remontan a genes Kush afganos autóctonos.
Una marihuana súper potente, incluso con los altísimos estándares de THC de hoy en día. Esta variedad para productores de hachís de la vieja escuela sigue siendo uno de los cannabis más pegajosos del mercado. Sus plantas suelen tener una altura típica de 60-90cm, y en el interior son casi tan anchas como altas. No necesitan podas ni técnicas de entrenamiento.
En exteriores de climas mediterráneos, pueden llegar a convertirse en monstruos de más de 2m de estatura. Su humo puede resultar un poco áspero para algunos, y tiene sabor a hachís; no hay que olvidar que es material ideal para charras. Los entendidos de las índicas y quienes buscan plantas fiables y productivas tendrán que empezar a hacer hueco en su jardín para esta veterana Kush.
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